La mejor ensaladilla rusa está en estos 10 lugares

Asumimos que en la actualidad se impone como plato estacional de calor y que ya no pega tanto como ración invernal. Pero qué diantres, los instintos del apetito no saben de calendarios y hacen de la cocina un reducto de transgresión. ¡La ensaladilla rusa todo el año ya! Ejem, ya más calmados nos disponemos a sufrir mucho con una cata de las mejores ensaladillas que poco o nada se parecen a aquella receta primigenia de la ensalada Olivier y que, con fecha más o menos imprecisa de 1860, fue pergeñada en el interior de las cocinas del opulento restaurante Hermitage de Moscú, más concretamente en el interior de la mente del chef Lucien Olivier. Aquella fórmula era tan loca que poco a poco fueron desapareciendo ingredientes como el urogallo en favor de productos más asequibles como la patata. En fin, que nos dejamos de historia y nos centramos en el presente. ¡Ensaladilla rusa para todos! Pero sólo las mejores, nada de engrudos ni argamasas.

1. La Tasquita de Enfrente, Madrid

Este santo lugar está en casi todas las listas. Es lo que tiene Juanjo López-Biedma, sabio de la cocina con fundamento que también reina con sus versiones lujosas y de temporada de la ensaladilla rusa. Sobre una base clásica de patata, huevo duro, zanahoria y bonito, el plato se corona con caviar, huevas de erizo o trucha, esturión y colas de carabineros.

2. Frutos, Torremolinos

Con algún que otro galardón a cuestas, la ensaladilla de este restaurante histórico de cocina tradicional es famosa por su frescura y clasicismo. La mezcla se basta con guisantes, zanahoria, mayonesa en cantidad justa y patatas Monalisa. Eso sí, se permiten trozos de langostinos cocidos en el momento para ganar en sabor.

3. Samm, Madrid

Quien acude a esta arrocería no puede esconder que en el fondo va a por su ración de ensaladilla rusa excelsa. La gracia está en que los ingredientes no se presentan ligados sino sueltos por capas (primero la patata, luego el huevo, el guisante, la mayonesa con un especial toque ácido y al final el bonito o atún desmigado) con lo que cada cual se monta la pinchada a su aire.

4. Tapas 24, Barcelona

Semejante homenaje de Carles Abellán al taperío clásico no podía dejar pasar una buena receta de ensaladilla. Sin salirse de la fórmula más típica, no falta ni sobra nada, ni siquiera los picos de pan a modo de banderillas.

5. Central Bar, Valencia

Algo parecido ocurre con el bar que Ricard Camarena tiene abierto en el Mercado Central de la capital del Turia. Para completar la comanda de bocata y raciones, una de ensaladilla, entera o media, que entra sin querer gracias a una mayonesa airosa y unos ingredientes básicos sin grandes tropezones. Ah, y los picos son artesanales. Más ligereza si cabe.

6. Casa Rafa, Madrid

Otra ensaladilla rusa –y madrileña- imprescindible. Conocida de siempre por los disfrutones más veteranos, esta ración servida en barra o en sala de esta conocida marisquería conjuga los ingredientes habituales aunque prescinde del pimiento y la zanahoria. Se sirve acompañada de ventresca de bonito, todo hay que decirlo.

7. La Espiga, San Sebastián

Si nos vamos de pinchos y estamos en Donosti no conviene olvidarse de esta barra bien surtida en la que no suele faltar el sencillo bocado de ensaladilla sobre rebanada de pan y con una gambita pelada en todo lo alto. Te sabrá a poco, lo sabemos.

8. La Antoñita, Madrid

Ya que estamos nos damos el capricho de entrar en La Posada del Dragón y, de paso, entablar relación con una Ensaladilla Rusa 1864 que no es sino el intento de reproducir la originalísima ya mencionada en nuestra introducción. El platazo está coronado por un generoso aporte de huevas de arenque.

9. El Granaíno, Elche

Uno de los entrantes más demandados de este mesón de arroces, guisos de cuchara y tapas de orígenes andaluces. Si uno va a tiro hecho, mejor quedarse en la barra, eje pivotante del negocio. La ensaladilla es generosa pero nada empalagosa y se enriquece a base de bogavante.

10. Alhucemas, Sevilla

Si bien podríamos haber escogido la ensaladilla del Donald, lo mismo nos da que nos da lo mismo, pues la de este restaurante está a la altura de las mejores de Sevilla y del mundo entero. También aporta bogavante, algo que sin duda aceptamos con agrado.