Lo que jamás debes hacer en un hotel: Te puede salir muy caro

Viajar y alojarse en un hotel es uno de esos placeres que todos disfrutamos alguna vez. Pero, ¿te has parado a pensar que hay ciertos hábitos muy comunes que pueden acabar costándote dinero o incluso arruinarte la experiencia? Un experto ha dado la voz de alarma sobre varios errores habituales que cometemos sin darnos cuenta. Ha llegado el momento de analizar esas pequeñas acciones que pueden salir muy caras y que deberíamos desterrar si queremos disfrutar de una estancia agradable.

Hábitos que debes evitar en un hotel para no llevarte un susto

Poner la maleta sobre la cama

Uno de los hábitos más extendidos nada más entrar en la habitación es dejar la maleta sobre la cama. Parece algo inocente, pero puede suponer un auténtico problema, tanto para tu salud como para la limpieza del lugar. Piensa en todo lo que ha tocado tu maleta desde que saliste de casa: suelos de aeropuertos, maleteros, aceras… Al dejarla sobre la cama, estás trasladando esa suciedad al sitio donde vas a dormir. Los expertos en higiene lo tienen claro: la maleta, siempre mejor en el suelo o en un soporte específico.

Abusar de la climatización

Es muy tentador llegar a la habitación y poner el aire acondicionado a tope en verano o la calefacción en invierno, pero este gesto, además de aumentar los gastos del hotel, tiene un impacto directo en el medio ambiente. Muchos huéspedes dejan encendidos estos aparatos todo el día, incluso cuando no están en la habitación. ¿Lo harías en casa? Según los expertos, es mucho mejor mantener temperaturas razonables (alrededor de 21°C en verano y 25°C en invierno) y apagar la climatización al salir. Así no solo ayudas al planeta, sino que también evitas sorpresas desagradables en forma de recargos o sanciones en algunos alojamientos.

El cambio innecesario de toallas

¿Cuántas veces cambias las toallas en casa? Lo habitual es usarlas varios días, pero en los hoteles solemos pedir que nos las cambien a diario. Este gesto, que puede parecer una tontería, supone un gasto enorme de agua y energía. Algunos hoteles ya incluyen mensajes en el baño para concienciar a los clientes, recordando que reutilizar las toallas es un acto responsable. Pequeños cambios de mentalidad suponen un gran ahorro y ayudan a cuidar el entorno.

La comida del buffet

Si hay un lugar donde se dispara el derroche en los hoteles, ese es el buffet. La tentación de llenar el plato más de la cuenta o coger comida «por si acaso» acaba con muchos alimentos en la basura. Recuerda que coger más de lo que puedes comer es un despilfarro y, en algunos hoteles, incluso pueden cobrarte si dejas demasiada comida. Además, llevarse alimentos del buffet suele estar prohibido. Lo más sensato es servirse raciones pequeñas y repetir solo si realmente tienes hambre. Así evitarás el desperdicio y contribuirás a una gestión más eficiente de los recursos del hotel.

Consejos prácticos para disfrutar del hotel

Trata la habitación como si fuera tu casa

Un consejo muy sencillo pero efectivo es comportarse en el hotel como lo harías en tu propio hogar. Respeta el mobiliario, no ensucies en exceso y utiliza los servicios con moderación. Recuerda que detrás de cada estancia hay un equipo de personas que trabaja para que todo esté perfecto. Ser considerado con el personal y con los otros huéspedes ayuda a crear un ambiente agradable para todos.

Infórmate sobre las normas del hotel

Cada hotel tiene sus propias reglas, desde el uso de determinadas instalaciones hasta el horario del desayuno o el acceso a la piscina. Leer la información que te facilitan al hacer el check-in es clave para evitar malentendidos o cargos inesperados. Si tienes dudas, pregunta en recepción: te ayudarán encantados y evitarás problemas.

Cuida tus pertenencias y la seguridad

Por último, no descuides la seguridad. Guarda tus objetos de valor en la caja fuerte, no dejes la puerta de la habitación entreabierta y asegúrate de cerrar bien ventanas y balcones. Muchos disgustos se pueden evitar con un poco de precaución.

En definitiva, viajar y alojarse en un hotel puede ser una experiencia maravillosa si evitamos ciertos errores que, a la larga, pueden salirnos muy caros. Desde pequeños gestos de higiene hasta el uso responsable de los recursos, todo cuenta. Si tienes presentes estos consejos, disfrutarás mucho más de tu viaje y contribuirás a que todos podamos seguir viajando de forma sostenible y segura.
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