Los británicos amenazan con no viajar a España por esta nueva ley

España siempre ha sido uno de los destinos favoritos para los turistas del Reino Unido. No es para menos, ya que nuestro país ofrece sol, playas, gastronomía y una gran variedad de planes para todos los gustos. De hecho, más de 18 millones de británicos nos visitan cada año y suponen una parte fundamental para el sector turístico nacional. Sin embargo, recientemente se ha generado cierta polémica entre los ciudadanos británicos y que amenazan con no viajar a España.

La nueva ley que ha detonado el descontento

El motivo principal es la nueva ley antitabaco impulsada por el Gobierno, que pretende endurecer aún más las restricciones al consumo de tabaco y vapeadores en espacios públicos.

Esta normativa, que actualiza la Ley 28/2005, prohíbe fumar y vapear en lugares tan habituales como piscinas públicas, marquesinas de autobús, vehículos comerciales, campus universitarios, patios de colegio, instalaciones deportivas o parques infantiles. Pero lo que más ha llamado la atención es la inclusión de las terrazas de bares y restaurantes como espacios libres de humo.

Reacciones en Reino Unido: «Si no se puede fumar, no vamos»

La reacción no se ha hecho esperar. Medios británicos como Birmingham Live han recogido quejas de turistas habituales en España, que han expresado su malestar y han llegado a plantearse cambiar de destino durante el verano. En redes sociales se pueden leer comentarios como «Entonces no iré a España. Iré a otro sitio» o «Ya no me van a dar mi dinero, ¡allá vamos Portugal!».

Otros usuarios lamentan que la medida afecte a la hostelería, temiendo que bares y restaurantes noten la ausencia de clientes británicos por no viajar a España. Para muchos, parte de la experiencia de vacaciones en España es poder disfrutar de una copa o un café en una terraza, algo que ahora no podrán compaginar con fumar.

¿Por qué molesta tanto la prohibición en terrazas?

En Reino Unido, las restricciones sobre el tabaco en interiores llevan años en marcha, pero todavía se permite fumar en terrazas y espacios abiertos de bares y pubs. Por eso, para muchos británicos, la idea de no poder hacerlo en España rompe con lo que consideran parte de su ocio vacacional. Es precisamente en las terrazas donde más impacto tiene la nueva ley, y donde se centra la mayor parte de las quejas.

Cambios en la venta y publicidad

Otro aspecto relevante de la nueva normativa es que se limita la publicidad, promoción y patrocinio de productos relacionados con el tabaco. Esto implica que desaparecerán logotipos y referencias a marcas en elementos tan cotidianos como sillas, mesas o sombrillas de los bares, algo que también forma parte del paisaje habitual en muchas zonas turísticas.

La intención de estas restricciones es clara: proteger la salud pública, reducir el número de fumadores y, especialmente, evitar que los menores accedan de forma fácil a estos productos. Sin embargo, la percepción desde algunos sectores turísticos británicos es que se trata de una medida excesiva que puede restar atractivo a España como destino de vacaciones.

¿Puede afectar realmente al turismo?

La preocupación entre los profesionales del turismo es evidente. El turista británico es uno de los más fieles y habituales en destinos como la Costa del Sol, Canarias o Baleares. Una caída en el número de visitas podría suponer un duro golpe para hoteles, bares y restaurantes que dependen en gran medida de este público.

No obstante, hay que recordar que España sigue ofreciendo muchos otros atractivos y que las restricciones al tabaco son cada vez más comunes en toda Europa. Países vecinos como Portugal o Francia también han endurecido sus leyes, aunque de momento no han dado el paso de prohibir fumar en terrazas de forma tan clara como lo plantea la nueva ley española.

Opinión de los hosteleros

Entre los hosteleros españoles hay división de opiniones. Algunos creen que la medida puede ahuyentar a ciertos clientes, especialmente extranjeros, mientras que otros consideran que ganarán nuevos públicos que valoran espacios libres de humo. En cualquier caso, todos coinciden en que el turismo británico es fundamental y esperan que esta polémica no tenga un impacto demasiado negativo.

¿Cambiarán los británicos de destino?

La amenaza de dejar de venir a España ha calado en algunos foros y medios británicos, pero la realidad es que muchos turistas valoran otros aspectos como el clima, la hospitalidad o la oferta cultural y de ocio. Habrá que esperar a ver si la nueva ley realmente influye en la elección del destino o si, como otras veces, la polémica se diluye con el tiempo y los británicos siguen apostando por España como su lugar favorito para las vacaciones de verano.

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