La capital catalana cuenta con multitud de atractivos turísticos que no debes perderte. Para que no te olvides de algunos puntos, hemos recopilados para ti los 7 monumentos de Barcelona imprescindibles en tu visita.
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No nos hemos vuelto locos, aunque se trata de un parque de 17 hectáreas de extensión, su diseño inspirado en formas de la naturaleza y las múltiples esculturas que configuran este decorado de ensueño concebido por Gaudí, lo convierten en uno de los monumentos de Barcelona imprescindibles en tu visita. Colores, simbolismos y ese icónico banco con forma de serpiente en el centro del parque lo hacen único.
Y ya que estamos con Gaudí, él está detrás de otros de los monumentos de Barcelona que no te puedes perder. La Casa Batlló en pleno Paseo de Gracia es el mejor exponente de arquitectura modernista de la ciudad. Adéntrate en una de las construcciones más curiosas desde su patio de luces a las chimeneas que coronan la azotea. ¡Imprescindible!
Este antiguo albergue de monjas de clausura es actualmente uno de los monumentos de Barcelona más bellos que podrás visitar. Además, es una oportunidad única para contemplar de cerca el estilo gótico catalán y pasear por los antiguos dormitorios de las Clarisas y conocer cómo son las celdas de recogimiento que se ubicaban en torno al claustro.
Si quieres completar tus conocimientos sobre el gótico catalán dirígete a uno de los monumentos de Barcelona cuya visita es imprescindible. Los altos y ennegrecidos laterales de la Basílica de Santa María del Mar, en pie desde 1383, aportan ese misterio que ha sabido transmitir Idelfonso Falcones en su novela de ‘La Catedral del Mar’.
Tras uno de los monumentos de Barcelona cuya visita es imprescindible se esconde el mirador desde el que obtendrás una de las mejores vistas, y fotos, de la ciudad. Sube los 60 metros de altura de esta construcción inaugurada en 1888 con la que se quiere homenajear a Cristóbal Colón. Un consejo: sé paciente y huye de las horas punta porque te encontrarás con mucha gente y el lugar es relativamente estrecho.
De la misma época (1888) es otro de los monumentos de Barcelona que más habrás visto en fotografías. Fue levantado con motivo de la Expo de aquél año a pocos metros y sirviendo de entrada del Parque de la Ciutadella. Su característico uso de ladrillo y los acabados decorativos le han dado una belleza única convirtiéndolo en un símbolo de la ciudad.
No todo son paseo por la historia y los clásicos, los monumentos de Barcelona imprescindibles en tu próxima visita también tienen hueco para lo moderno. Y en ese terreno la Torre Agbar se ha convertido en el símbolo de la ciudad a pesar de llevar en pie tan solo desde 2005. Casi 150 metros en forma de bala cuyo principal atractivo, además de la forma, es la iluminación nocturna.
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Última modificación 10 de mayo de 2024
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